Leer y Comer 12° Edición
Más de 20 mil personas disfrutaron la 12° Edición de la Feria Leer y Comer
Reconocidos cocineros, escritores y periodistas pasearon por Concepción Arenal y Av. Warnes
Este fin de semana, más de 20 mil personas disfrutaron el espacio creado para acercar la lectura, la gastronomía y, especialmente en esta edición, experiencias diseñadas para todo el público, con entrada libre y gratuita.
La Feria contó con la presencia de reconocidos escritores, periodistas y cocineros.
El broche de oro de esta nueva edición fue la participación de Jorge Fernández Díaz, que acompañado por Cristina Pérez, emocionó a un auditorio repleto de seguidores, hablando de “Los gozantes y los sufrientes”, como dos perspectivas de ver la vida.
Se destacaron las participaciones de Catherine Fulop, que contó a través de todas sus experiencias cuál es su secreto de bienestar y belleza; de Roberto y Mateo Petersen, que presentaron “Pizza Zën”, una nueva iniciativa que surgió de un ritual familiar; del Dr. Daniel López Rosetti, quien habló sobre “Equilibrio. Cómo pensamos, sentimos y decidimos”; de Dolli Irigoyen que presentó a un conjunto de productores genuinos de la Provincia de Buenos Aires, quienes, además, estuvieron presentes en el Mercado de Productos de la Feria; de Florencia Etcheves, que presentó su nuevo libro “La Sirena” y fue entrevistada por su editora Adriana Fernández; del chef embajador de la gastronomía Japonesa Iwao Komiyama, quien contó los secretos y tips en la preparación de Conitos y Gunkan Sushi; de la pediatra Sabrina Critzmann, que presentó su libro “Hoy no es siempre” y habló sobre “Los sabores de la infancia”; de Pablo Massey, quien presentó su libro “Pablo Massey Cocina”; y de Santiago García, hablando de su pasión por correr y sobre el running como una forma de disfrute y felicidad.
También estuvieron Romina Pereiro, quien planteó una guía de propuestas concretas para incentivar a padres y chicos a tener hábitos de alimentación saludables, a través de su libro “¡A Comer! Sano fácil y rico”; Máximo Cabrera, hablando sobre la cocina como espacio de transformación; Laura Di Cola presentando una alimentación rica, saludable y sin desperdicios; Julieta Caruso y Paola Harwicz hablando sobre los mitos y verdades a la hora de endulzar; y Jimena La Torre, quien además de leer la borra de café al público, dio una charla sobre “Los secretos escondidos en la carta natal”.
Además, presentaron sus libros: Pamela Stupía, la saga “Amistades Imperfectas”; Ale Temporini, “Mi aventura sin gluten”; Patricia Courtois, “Viaje al sabor”; Florencia Andrés y Verónica de Andrés, “Renovate con confianza total”; Pedro Picciau, “Italpast”; y Germán Torres, “Pan de garaje”.
Por primera vez, Leer y Comer contó con el show en vivo de Maxi Trusso, quien cerró la jornada del sábado a puro ritmo. Como banda telonera se presentó SINGAPUR, tocando los mejores temas de electro-rock, de sus álbumes Holograma y Materia.
En esta oportunidad, la reconocida barbería de Buenos Aires, Salón Berlín, estuvo presente en la Feria con sus navajas, brochas y clásicos que hicieron de las barbas del público toda una experiencia, de manera gratuita.
La apertura del sábado se desarrolló de la mano de Marina Valor, que junto a su banda, tocaron los mejores covers y temas propios de soul, jazz y blues en el auditorio de Margen del Mundo. En el escenario Montenegro, estuvo a cargo de Batacazo Tango Club. Con su milonga, los bailarines profesionales de Tango, Facundo Barrionuevo y Aldana Figueroa brindaron una clase y demostración de baile.
Esta edición de la Feria Leer y Comer, tuvo la presencia de un importante y variado Mercado de Productos, artesanales, regionales, agroecológicos e hidropónicos, curados por la Provincia de Buenos Aires, que fue especialmente invitada.
Desde las 12hs. El sábado 5 y domingo 6 de octubre, una gran cantidad de personas de distintos puntos de Buenos Aires y del interior del país disfrutó en la calle de los mejores FoodTrucks, con deliciosas propuestas gastronómicas; de los puestos de las grandes editoriales, librerías y sellos independientes en las que las figuras firmaban sus libros; y un amplio espacio de recreación para chicos que contó con clases de magia, búsquedas del tesoro, talleres de pintura y cocina, juegos, maquillajes artísticos y lecturas.